23.2.08

Materia distorsionada.

Sólo la maldita decisión de un atardecer
Traslada reacciones que en la sobriedad son inimaginables,
Seguir la línea pavimentada, que la noche presenta al ser
Provoca a cada segundo momentos innumerables.

La atención a las cosas que nunca estuvieron ahí,
La ignorancia hacía detalles importantes,
El deseo de ser un ser libre en el espacio
Alerta a la conciencia inalterada,
Futuras preguntas,
Espacios vacíos,
Dudas ennegrecidas,
Constante paranoia,
Recuerdos que nublan los sueños
Aparecen en los extraños amaneceres.
La distorsión de cualquier noche
Marca la secuencia de los latidos,
Los días normales;
Los encuentros con cuerpos similares,
Las dudas incrementan,
Las miradas chocan en lo más profundo de la conciencia
Rebotan en suspiros de relajo,
O tal vez en maldiciones temporales,
En el peor de los casos,
En eternos problemas que llevan al entierro por un atajo.
Los sentimientos profundos no existen en los abrazos
Si no que una necesidad como animal lleva a la expresión
Al gesto con sonrisas deformes y animadas por la noche,
El tiempo se hace corto y eterno en momentos,
Las luces desfiguran la materia a una increíble conveniencia.
El papel verdecillo con aliento a deseo,
Los tatuajes de la materia que encandilan los ojos,
Forman parte de la incertidumbre lunar.

Los secretos quedan entre paredes,
tratos,
roces,
voces,
humos,
tragos,
y la maldita inconciencia que en momentos como este,
hace flotar las imágenes que en el suelo estuvieron,
mis recuerdos revueltos y el ruido del río caudaloso,
me deja idiota cuando supe que estuve en momentos lunares.
El sudor en el invierno altera mi calor,
Un caudaloso río recorre mi espalda como una fría noche,
Como la misma noche en que la materia se descongeló.

1 comentario:

Andante dijo...

"Mmmmmmmmm. Pioooooola."